El fin, conservar el poder. El medio,
la promoción y tolerancia de la corrupción. No es casualidad que esa calamidad
sea “la” gran constante en la historia de México. Es el medio idóneo para
aceitar la maquinaria y proveer al pueblo no solo como se ha dicho, de pan y
circo, también de una chispa de esperanza para quiénes buscan un trato
preferencial en la sociedad y comodidades con el mínimo esfuerzo.
Veamos, en los sorteos
multimillonarios se necesita comprar boleto para participar de la esperanza de
salir de pobres. En el proceso de la corrupción, el participante siendo servil,
dejándose sobornar, pervertir y enviciar, compra boleto todos los días para
mantener la esperanza de sacarse los “millones” primero en un encargo sin
importancia, para tal vez, algún día, participar del círculo del poder, pero
eso sí… después de impartir codazos y aplicar toda suerte de malas mañas pues,
como bien se sabe, quienes han llegado antes, difícilmente compartirán con
quien no posea apellidos de gran prosapia; de aquellos que se han escuchado
desde los tiempos de María Conesa.
Y habrá a quien la política no
interese. Pero indudablemente si, pagar el módico 10 por ciento por un
contratito por aquí y otro contratote por allá; hasta que, ya con fortuna
suficiente, se haga merecedor al honor de que le pasen la charola para hacer el
“donativo” que engrosará el río de los recursos de la corrupción para la
campaña del candidato en turno…
Pero los recursos de la corrupción no
solo empobrecen las arcas del erario al incrementar los costos de la obra
pública y las adquisiciones del gobierno federal. También provienen de las
grandes empresas trasnacionales, empeñadas en expandir sus negocios e incrementar
sus utilidades. Empresas que hacen uso del cohecho donde quiera que haya mafias
corruptas, de las que en México sobran. Tal es el caso de Wall-Mart que a más
de uno tendrá nervioso y muchos otros de triste memoria que han quedado
cubiertos con el manto de la impunidad.
Lamentablemente el daño que los
corruptos causan al país es impresionante. El pasado 26 de abril, en su edición
electrónica, el diario “El Economista” citando cifras del Banco Mundial, estima
que la corrupción ha ocasionado pérdidas del orden del ¡9 por ciento del
Producto Interno Bruto! porcentaje nada sorprendente si consideramos que es un
secreto a voces el 10 por ciento que se ha de pagar por recibir un pedido o un
contrato. ¿A cuanto equivale ese porcentaje? Sin considerar la inversión en
Pemex, a un poco más de la mitad del gasto programable del gobierno.
Muchos problemas podrían resolverse al
cortar de tajo con las prácticas corruptas que hacen del país uno cada vez más
pobre y sometido a intereses ajenos. ¿Qué cómo podría lograrse?
Es momento de los sueños guajiros que
tanto me gustan: a) Con un liderazgo provisto de voluntad férrea que promueva a
la honestidad con el ejemplo; y como el valor a privilegiar y reconocer por su
gobierno; b) Instrumentando estrategias que no pretendan tal como, muy a la
conveniencia de los corruptos, lo propone el Banco Mundial: combatir por igual
al corrupto que pide 10 pesos para “el refresco”, que al que trafica con
influencias y hace sus tratos “de negocio” en las Vegas o en Montecarlo.
Eso está visto que solo funciona para
hacer publicidad (circo), meter a la cárcel a alguno que otro, de preferencia
enemigo político- que al rato sale libre con un usted disculpe dado en lo
oscurito.
También es imperativo dejar de lado
los sentimientos de victimización que nos provoca la corrupción. En cambio hay
que otorgar nuestro voto a quien a nuestro juicio mejor corresponda al perfil
del líder que necesita el País y si gana, cambiar el grito de “no nos falles”
por otro que diga “en que te ayudo”
Hoy quienes detentan el poder se
niegan a abandonarlo por dos razones: por apego al poder mismo y por miedo a
que salga a flote la corrupción que ya no puede ocultarse.
Reciban un afectuoso abrazo,
Enrique
Chávez Maranto
enrique.chm@gmail.com
twitter.com/enriquechm
Uf Enrique, alabo tu optimismo pero la metástasis, según sé, no tiene remedio, aunque "el paciente" sobrevive milagrosamente gracias a que ignora el diagnóstico.
ResponderBorrarJajaja! Excelente comentario, sí, el padecimiento es grave y no espero que se resuelva en un sexenio ni en dos pero no hay que perder la fe.
BorrarEscuche la opinión de un personaje que merece toda mi atención .... hay tanta corrupción en este nuestro México que la solución como la imaginaramos ya no es posible, asi pongan al candidato que sea, del partido que sea o incluso de los llamados independientes.
ResponderBorrarPocas posibilidades le ve al Peje, sin embargo dice que si el cielo nos concede misericordia, el sería el idoneo para crear las condiciones de desastre total, requisito indispensable para ...borron y cuenta nueva
Seguir con el PAN o el PRI implicaría una larga agonía para el país. Coincido con su amigo, el Peje representaría el único medio para el cambio ya sea porqué efectivamente lograra construir los cimientos para un cambio gradual pues es imposible reconstruir ni en un sexenio, ni en dos, ni en tres... lo que hemos destruido en al menos 200 años; o porque, como dice su conocido, nos lleve al desastre total que nos obligue al borrón y cuenta nueva. Lo primero implica una lenta recuperación y requeriría la voluntad de vivir del paciente. Lo segundo nos llevaría a una revolución muy dolorosa de resultados muy inciertos. En las revoluciones no siempre ganan los buenos.
Borrar¡Hola! Físico, la corrupción, la impunidad y la falta de calidad moral en la mayoría de los que ostentan el poder, es tan poderosa que difícilmente quieren soltarla los que la tienen, los que no la tienen les vale gorro prometer y prometer lo que nunca van a cumplir ni van hacer en beneficio de su país, solo quieren el poder, ya de todos nuestros honestos políticos para la presidencia de nuestro País no hay ni a cual irle, pero si no voto de todos modos gana el que ya tiene su puesto asegurado, votemos o no votemos. Que triste las elecciones en nuestro País. Para que le hacen al Loco si ya tienen todo bien amarrado.
ResponderBorrarSaludos cordiales
elia*
ASI ES.
ResponderBorrarY MIRA QUE HAY TELA DE DONDE CORTAR, EN EL FONDO ES UN GOLPE A CIERTO PERSONAJE, DE LA POLITICA DEL AYER.
UN GOBIERNO Y TAMBIEN EL ACTUAL QUE SE HAN VOLADO LA BARDA, HAN IDO MAS ALLA DE LO QUE SE PERMITIA. MINERIA, SINDICATOS, SIN INVERSION Y ACUMULANDO UNA BOLSA QUE COMO SALINAS SE LA ROBO ESTOS VAN POR AHI. VE LA CANTIDAD DE DINERO QUE TIENE ESTOS PARA FONDO DE DESARROLLO O GARANTIA O DEFENSA, ESO SE VA, SE VA , SEVE Y SE FUE LA BOLA.
Gracias por compartir esta muy bueno y muy a doc en esta temporada tu articulo, un abrazo
ResponderBorrarAtte Rosalinda
Corrupción, término de moda que ha taladrado las entrañas del México cultural, lleno de tradiciones y folklor.
ResponderBorrarFolklórico? Sí, lleno de colorido partidista, matices, algarabía e ingenio mexicano encauzado a corroer astutamente el sistema para beneficio de unos bien abastecidos económicamente y otros que en camino van portando el poder, a su vez delegando por algunas cifras la capacidad de ilegal infracción.
¿Qué cómo podría lograrse, la recuperación de la Justicia Social?
Solo queda ese batallón en pleno curso de transformación, nuestros hijos!,
Apostemos por ellos!,
Trabajemos en ellos!
Vivamos por ellos!
Y continuemos escribiendo por ellos, que por medio de este tipo de círculo social y otros más nos motivan a encontrar respuestas y Por qué no?, Cuestionarnos aún más.
Lo importante de esto es: -Desterrar la ignorancia que algunos quieren implantar-
Saludos
Atte. Nora
Mil gracias por el comentario. Muy atinado!
BorrarDe acuerdo con NOra, a las nuevas generaciones hay que recalcarles el amor al país, ser honestos y comprometidos, y entonces (tal vez con ayuda de Merlin o Voldemor) logremos cambiar o ir cerrando la cloaca que es el agandalle, el valemadrismo y la corrupcion, caracteristicas tristemente afianzadas en el mexicano en general, desde la conquista y la colonia!
ResponderBorrarSAludos Enrique
@manezdpr