-¡Vaya que si es hermosa! ¿No te parece?
-¡Qué le puedo decir Señor! Escogimos bien el lugar pero parece que algo no nos funcionó bien con la semilla…
Sin contestar, Jesús descendió un par de escalones, se sentó en el cómodo sillón del mirador, se embeleso como siempre ante la vista de miríadas de estrellas entre las cuáles destacaba ya aquel hermoso planeta azul..., bebió un breve sorbo de la copa de vino que le aguardaba para entonces perder su mirada en los recuerdos, maravillosos unos, atroces otros, de aquella breve visita a las tierras de Judea.
-Hace ya mucho tiempo que no venía Señor…
-Si, es mucho para ellos, muy poco para nosotros…contestó Jesús, para ser exactos 2008 de sus años…
No es fácil olvidarlos pensó Jesús para sus adentros ¡Cómo hacerlo! Sí son una especie muy querida. Seres que en la receta de su creación se incluyó como ingrediente el drama permanente del dilema. Congruentes con su naturaleza los opuestos les definen: Sentimientos de temor y amor, conciencia y ignorancia, humildad y soberbia, generosidad y avaricia, todos a un tiempo, en el mismo crisol, dieron como resultado la maravillosa diversidad de su existencia, se dijo, el Amor para estas criaturas no lo es sin él sazón del sufrimiento…temen Amar.
-Pero aquí estamos nuevamente…
-¿Puedo preguntar porqué Señor?
-Las cosas no les han ido bien últimamente. Han llegado a extremos peligrosos. La situación es de tal forma, en extremo delicada, que está en riesgo su permanencia y la verdad no veo como puedan corregir el rumbo sin nuestra ayuda. El balance no nos resultó perfecto. Al principio el dilema cumple su propósito y mantiene el equilibrio pero pronto se pierde y periódicamente hay que intervenir para recobrarlo. Eso fue justamente lo que hicimos en nuestra última visita…
Y si, los equilibrios se han roto. Los efectos de la prelación de la ignorancia, el temor, la avaricia y la soberbia sobre la conciencia, el amor, la generosidad y la humildad humanas están ahí, salvo para aquellos que prefieren encerrase en su esfera de cristal.
Y si, no solo se requiere “un” ajuste, se requiere un ajuste mayor. En una época donde el uso de indicadores está de moda, el principal de ellos, el apego a los valores se desplomó, está perdiendo la batalla en todas las regiones, niveles y sectores de la actividad humana.
Algunos pensarán que esta es una visión pesimista del mundo. Y no quisieran, eligen ver, y ven, un mundo mejor. Sin duda y sin juicios de por medio, absolutamente todos tenemos ese derecho, pero los hechos están ahí. Si el indicador de los valores no convence, veamos los síntomas de la enfermedad ya no digamos desde la perspectiva global, en el contexto de palabras extrañas como geopolítica, hegemonías, plutocracias, globalización entre otras tantas.
Veámosla tan solo desde la perspectiva de cualquiera de nuestras comunidades, de lo que está a la vuelta de la esquina: corrupción, desempleo, inseguridad, alcoholismo, drogadicción, depredación ambiental y pobreza entre otros tantos males. Porque justo ahí, en la perspectiva más cercana, justo es donde está la solución.
Mucho se me ha dicho que no basta con señalar, que hay que dar soluciones. Y tienen razón. Solo que la solución no cabría esperarla de la boca de alguien más. La solución está en todos y cada uno de nosotros. Cada cual en la medida de sus posibilidades. Cada cual en la trinchera que le corresponda como padre, empleado, patrón, líder, político, hijo, esposo, funcionario público…
Cada cual, cuando tenga que elegir, habrá de considerar que la conciencia, el amor, la generosidad y la humildad no son ajenos, siempre han estado en nosotros, como ingredientes de la maravillosa receta de la diversidad humana.
Cada cuál habrá de conocer que los hechos, hechos son y que lo que cuenta es la actitud con la que se enfrentan…Cuenta la leyenda que el último rey de Granada, Boabdil, al salir camino de su exilio en las Alpujarras, cuando coronaba una colina, volvió la cabeza para ver su ciudad por última vez y lloró, escuchando de su madre la sultana Aixa "no llores como una mujer lo que no supiste defender como un hombre”. Lo que ocurrió entonces con el rey Boabdil es que no supo reconocer sus debilidades y en consecuencia no supo como superarlas. A esa colina se le llamó desde entonces la colina del Suspiro del Moro…
Por favor, no hagamos lo mismo.
Con mis mejores deseos,
Enrique Chávez Maranto
enrique.chm@gmail.com
Las ideas son por los demás... así que en este espacio encontrarás las ideas que antes no lo eran por quedarse en la intimidad de mis temores. No serán buenas, ni malas, acaso ideas que lo serán por tí.
domingo, 22 de febrero de 2009
domingo, 15 de febrero de 2009
El Gran Hermano - The Big Brother
Juan caminaba rumbo a su casa cuando, repentinamente, un fuerte empujón lo arrinconó contra la pared. Lo demás sucedió en segundos: insultos, golpes, amenazas…
-¡A ver pendejo…! Traiga acá el celular… No la haga de pedo…
Con el alma en un hilo, Juan entregó apresuradamente sus escasas pertenencias incluyendo el aún reluciente teléfono celular adquirido semanas antes tras cumplir con los requisitos de ley…El asalto concluyó súbitamente cuando el delincuente con una sonrisa cínica pintada en el rostro le espetó:
-¡No te vayas a pasar de listo cabroncito!, ¡Si me suspenden la línea se donde vives pendejo…!
Y a buscar su siguiente víctima. El “Canaima” –así apodaban al ladrón- tenía que cubrir la cuota de 10 celulares diarios que entregaría al jefe de una de las tantas bandas de secuestradores, Gabino, quien en esos momentos “conversaba” desde su automóvil -protegido para no recibir las señales de los satélites GPS- con el Papá de una de sus víctimas, el Ingeniero Asunción Peraza, a quien exigía una millonaria cantidad por la vida de su hijo… La comunicación duró escasos 3 minutos y también la vida útil del teléfono que salió disparado por la ventanilla. Acto seguido, Gabino con toda calma cambio de ruta, su asistente-cómplice le pasó otro teléfono de los muchos que comedidamente le proveían y esperó a que el siguiente atribulado Papá le contestara…
La historia anterior es algo que ya ocurre, la delincuencia no compra teléfonos celulares y como dice Don Teofilito ¡Ni lo hará!, ¡los roba! Menos ahora cuando la reforma a la Ley Federal de Telecomunicaciones exige entre otras muchas cosas registrar la huella dactilar del comprador y la “ubicación digital del posicionamiento geográfico de las líneas telefónicas” ¿Puede usted creer que un delincuente por muy burro que sea dejará que lo fichen y que conozcan donde vive solo por comprar un celular? ¡Jamás!
Entonces ¿En que estaba pensando el gobierno si es más que obvio, para cualquiera que tenga dos dedos en la frente, que la medida no servirá para combatir a la delincuencia? Al leer con detenimiento la multi citada reforma concluyo que el propósito no es controlar a la delincuencia, es controlar a los ciudadanos. ¡Órale! A ver, a ver, a ver… Enrique, ¿Te das cuenta lo que acabas de afirmar? Si estimada Conciencia, si me doy cuenta de lo que acabo de afirmar. El asunto es grave… ¿Grave? ¡Gravísimo!
Punto y aparte el “fichaje” que representa entregar tu huella digital la reforma obliga a los concesionarios a registrar (lo que de acuerdo a la Real Academia Española es sinónimo de grabar) y controlar todas las comunicaciones de cualquier tipo para entregarlas a solicitud de los procuradores de justicia “cuando realicen funciones de investigación de los delitos de extorsión, amenazas, secuestro, en cualquiera de sus modalidades o de algún delito grave o relacionado con la delincuencia organizada, en sus respectivas competencias” pero sin mencionar que deba existir la orden de un juez de por medio.
Dicho de otra manera, el gobierno tendrá a su disposición en bases de datos a través de las concesionarias del servicio de telefonía móvil: Todos tus datos personales incluyendo la huella dactilar, la ubicación geográfica precisa de tu casa lo que permite a cualquiera con acceso a Google Earth, teclear las coordenadas y ver el tamaño de tu casa, su distribución exterior, los accesos, etcétera y, por si fuera poco, el gobierno también podrá rastrear con precisión satelital todos tus movimientos a partir del celular; conocerá todas tus comunicaciones: de qué hablaste, cuando y con quién; que mensajes de texto o multimedia envíaste, cuando y a quien. El asunto me pareció grave y me pregunté, ¿Qué a caso esto no viola las garantías individuales consagradas en nuestra constitución? Presto, consulté la Constitución y salvo que no entienda el español, la respuesta es si, absolutamente, si viola las garantías individuales particularmente la descrita en el Artículo 16 Constitucional.
En mi articulo titulado “En donde están” (Publicado el 26/Ago/2008 en El Liberal del Sur de Coatzacoalcos) que redacté a propósito de la firma del “Acuerdo Nacional Por la Seguridad, Justicia y la Legalidad” advertí que deberíamos estar atentos para evitar acciones que intentaran violar las garantías individuales pretextando la seguridad. Este es el caso, en el punto VII de ese acuerdo esbozaron la intención que ahora, en la reforma a la Ley de Telecomunicaciones concretaron.
No obstante, quiero pecar de ingenuo, voy a suponer que estoy imaginando cosas, que mi visión es “catastrofista”, que estoy viendo “moros con tranchete” y que la intención del gobierno es buena y santa. De ser así –cosa que insisto, lo dudo- me pregunto ¿Quién nos asegurará que esa información no termine en manos de la delincuencia que pretende combatir? ¿Recuerda usted cuando un funcionario vendió el padrón electoral? De acuerdo a las cifras de la “Open Security Foundation” el año pasado fue él de mayor número de incidentes de robo de información. En los últimos años, de acuerdo a la misma fuente, centenas de millones de registros de usuarios bancarios donde se aplican los mayores estándares de seguridad, han terminado en manos de delincuentes. La organización del gobierno americano, el “Internet Fraud Complaint Center”, asegura que México se coloca en el 6° lugar en el mundo en este tipo de delitos solo después de la India y más allá de todo eso, lo que parecería a esta altura trivial ¿Quién asumirá el costo millonario de registrar y controlar? Seguramente no será el gobierno y mucho menos las concesionarias, seremos usted y yo con el incremento en el costo del servicio.
Le dí muchas vueltas al asunto y sinceramente no puedo imaginar un propósito honesto cuando se pretende colocar tal poder en manos de una autoridad que nos ha comprobado hasta el hartazgo su responsabilidad en el estado actual de la cosas en el país por ser omisa, simplemente incompetente o lo que es peor ¡cómplice!
Alguien me juzgó como idealista y romántico al pretender vivir en un marco de libertades y si definitivamente lo soy. No puedo aceptar al “Big Brother” en que se pretende convertir el gobierno. -Pero hombre, no seas ingenuo…me dice, si eso de registrar, grabar, controlar lo hacen desde hace mucho tiempo. Totalmente de acuerdo, lo hacen de una manera ilegal solo que ahora tendrán todo el derecho de hacerlo como en algún tiempo lo fue la esclavitud.
Nuevamente hago mías las palabras de mi hijo Guillermo cuando dice sentir estar en un país extraño, porque esto que vemos dice… No es México, México es mejor.
Con mis mejores deseos,
Enrique Chávez Maranto,
enrique.chm@gmail.com
-¡A ver pendejo…! Traiga acá el celular… No la haga de pedo…
Con el alma en un hilo, Juan entregó apresuradamente sus escasas pertenencias incluyendo el aún reluciente teléfono celular adquirido semanas antes tras cumplir con los requisitos de ley…El asalto concluyó súbitamente cuando el delincuente con una sonrisa cínica pintada en el rostro le espetó:
-¡No te vayas a pasar de listo cabroncito!, ¡Si me suspenden la línea se donde vives pendejo…!
Y a buscar su siguiente víctima. El “Canaima” –así apodaban al ladrón- tenía que cubrir la cuota de 10 celulares diarios que entregaría al jefe de una de las tantas bandas de secuestradores, Gabino, quien en esos momentos “conversaba” desde su automóvil -protegido para no recibir las señales de los satélites GPS- con el Papá de una de sus víctimas, el Ingeniero Asunción Peraza, a quien exigía una millonaria cantidad por la vida de su hijo… La comunicación duró escasos 3 minutos y también la vida útil del teléfono que salió disparado por la ventanilla. Acto seguido, Gabino con toda calma cambio de ruta, su asistente-cómplice le pasó otro teléfono de los muchos que comedidamente le proveían y esperó a que el siguiente atribulado Papá le contestara…
La historia anterior es algo que ya ocurre, la delincuencia no compra teléfonos celulares y como dice Don Teofilito ¡Ni lo hará!, ¡los roba! Menos ahora cuando la reforma a la Ley Federal de Telecomunicaciones exige entre otras muchas cosas registrar la huella dactilar del comprador y la “ubicación digital del posicionamiento geográfico de las líneas telefónicas” ¿Puede usted creer que un delincuente por muy burro que sea dejará que lo fichen y que conozcan donde vive solo por comprar un celular? ¡Jamás!
Entonces ¿En que estaba pensando el gobierno si es más que obvio, para cualquiera que tenga dos dedos en la frente, que la medida no servirá para combatir a la delincuencia? Al leer con detenimiento la multi citada reforma concluyo que el propósito no es controlar a la delincuencia, es controlar a los ciudadanos. ¡Órale! A ver, a ver, a ver… Enrique, ¿Te das cuenta lo que acabas de afirmar? Si estimada Conciencia, si me doy cuenta de lo que acabo de afirmar. El asunto es grave… ¿Grave? ¡Gravísimo!
Punto y aparte el “fichaje” que representa entregar tu huella digital la reforma obliga a los concesionarios a registrar (lo que de acuerdo a la Real Academia Española es sinónimo de grabar) y controlar todas las comunicaciones de cualquier tipo para entregarlas a solicitud de los procuradores de justicia “cuando realicen funciones de investigación de los delitos de extorsión, amenazas, secuestro, en cualquiera de sus modalidades o de algún delito grave o relacionado con la delincuencia organizada, en sus respectivas competencias” pero sin mencionar que deba existir la orden de un juez de por medio.
Dicho de otra manera, el gobierno tendrá a su disposición en bases de datos a través de las concesionarias del servicio de telefonía móvil: Todos tus datos personales incluyendo la huella dactilar, la ubicación geográfica precisa de tu casa lo que permite a cualquiera con acceso a Google Earth, teclear las coordenadas y ver el tamaño de tu casa, su distribución exterior, los accesos, etcétera y, por si fuera poco, el gobierno también podrá rastrear con precisión satelital todos tus movimientos a partir del celular; conocerá todas tus comunicaciones: de qué hablaste, cuando y con quién; que mensajes de texto o multimedia envíaste, cuando y a quien. El asunto me pareció grave y me pregunté, ¿Qué a caso esto no viola las garantías individuales consagradas en nuestra constitución? Presto, consulté la Constitución y salvo que no entienda el español, la respuesta es si, absolutamente, si viola las garantías individuales particularmente la descrita en el Artículo 16 Constitucional.
En mi articulo titulado “En donde están” (Publicado el 26/Ago/2008 en El Liberal del Sur de Coatzacoalcos) que redacté a propósito de la firma del “Acuerdo Nacional Por la Seguridad, Justicia y la Legalidad” advertí que deberíamos estar atentos para evitar acciones que intentaran violar las garantías individuales pretextando la seguridad. Este es el caso, en el punto VII de ese acuerdo esbozaron la intención que ahora, en la reforma a la Ley de Telecomunicaciones concretaron.
No obstante, quiero pecar de ingenuo, voy a suponer que estoy imaginando cosas, que mi visión es “catastrofista”, que estoy viendo “moros con tranchete” y que la intención del gobierno es buena y santa. De ser así –cosa que insisto, lo dudo- me pregunto ¿Quién nos asegurará que esa información no termine en manos de la delincuencia que pretende combatir? ¿Recuerda usted cuando un funcionario vendió el padrón electoral? De acuerdo a las cifras de la “Open Security Foundation” el año pasado fue él de mayor número de incidentes de robo de información. En los últimos años, de acuerdo a la misma fuente, centenas de millones de registros de usuarios bancarios donde se aplican los mayores estándares de seguridad, han terminado en manos de delincuentes. La organización del gobierno americano, el “Internet Fraud Complaint Center”, asegura que México se coloca en el 6° lugar en el mundo en este tipo de delitos solo después de la India y más allá de todo eso, lo que parecería a esta altura trivial ¿Quién asumirá el costo millonario de registrar y controlar? Seguramente no será el gobierno y mucho menos las concesionarias, seremos usted y yo con el incremento en el costo del servicio.
Le dí muchas vueltas al asunto y sinceramente no puedo imaginar un propósito honesto cuando se pretende colocar tal poder en manos de una autoridad que nos ha comprobado hasta el hartazgo su responsabilidad en el estado actual de la cosas en el país por ser omisa, simplemente incompetente o lo que es peor ¡cómplice!
Alguien me juzgó como idealista y romántico al pretender vivir en un marco de libertades y si definitivamente lo soy. No puedo aceptar al “Big Brother” en que se pretende convertir el gobierno. -Pero hombre, no seas ingenuo…me dice, si eso de registrar, grabar, controlar lo hacen desde hace mucho tiempo. Totalmente de acuerdo, lo hacen de una manera ilegal solo que ahora tendrán todo el derecho de hacerlo como en algún tiempo lo fue la esclavitud.
Nuevamente hago mías las palabras de mi hijo Guillermo cuando dice sentir estar en un país extraño, porque esto que vemos dice… No es México, México es mejor.
Con mis mejores deseos,
Enrique Chávez Maranto,
enrique.chm@gmail.com
domingo, 8 de febrero de 2009
Bienvenido
El propósito de esta página es presentar la relación de los textos que han despertado el mayor interés de mis lectores y la última publicación.
Los más de 190 artículos que encontrarás en el blog son de diversos temas, no hay un preferido, sin embargo en todos ellos encontrarás la intención de ser objetivo y expresar la opinión con un lenguaje sencillo y sin pretensiones.
Quienes con cierta frecuencia me visitan provienen de 52 países, principalmente de habla hispana, y 226 ciudades de la República Mexicana. Son gente de todas las edades, géneros, preferencias, ocupaciones, religiones y partidos políticos que cuando contribuyen con sus comentarios siempre encuentran una respuesta.
Finalmente te comento que mi propósito, punto y aparte de hacer lo que me gusta, es difundir las ideas, así que, si NO persigues fines de lucro puedes reproducir cualquier artículo, o parte de él, con la única condición de que me envíes un correo electrónico. Si deseas publicarlo en alguna revista o periódico te pido por favor que antes de hacerlo te pongas en contacto.
¡Mil gracias por tu visita!
Enrique Chávez Maranto
enrique.chm@gmail.com
Twitter: @enriquechm
El artículo de la semana
2a Propuesta: ¿A dónde vas? Los nefastos efectos del control basado en la desconfianza en el desarrollo del país.
2010
Laminas nuevas para el techo de Don Jorge... Conversación de una pareja antes de la visita a su colonia del candidato en campaña
Algarabía... Reflexión sobre la algarabía discordante de la vida moderna
Narcotráfico: De que lloren en mi casa... La estrategia de los Estados Unidos en su lucha contra el narcotráfico
2009
Va mi espada en prenda... ¡Voy por ella! La actitud de México ante la crisis financiera internacional
Sufragio Efectivo No Reelección... ¡Recargado! Hipotética conversación de quienes ejecutaron a Francisco I. Madero - actualizada
El Rompecabezas de la Vida… El relato de la inusual alianza de los Reyes Magos y Santa Clos…
2008
Siervo de la Nación... Una breve reflexión sobre el porqué de Don Benito Juárez.
El Diamante, reflexiones sobre la naturaleza del Ser… Una metáfora donde se compara la naturaleza del diamante y el Ser
2007
Sufragio Efectivo, No Reelección... Hipotética conversación de quienes ejecutaron a Francisco I. Madero
Para una gran cantina... ¡Un gran baño! Artículo que inició un exitoso movimiento ciudadano en Coatzacoalcos
Nuestra sufrida Madre Patria… Sobre el dolor que nuestra Patria sufre por lo que se ha hecho a sus hijos…
Un largo fin de semana... Relato de un viaje de fin de semana a Zacatlán de las Manzanas, Pue.
La caja de herramientas... Carta dirigida a mis hijos a propósito de las decisiones que habrán de tomar
A la fuerza... ¡Ni los zapatos entran!!
“How many years can a mountain exist, Before it's washed to the sea? / Yes, 'n' how many years can some people exist, Before they're allowed to be free? / Yes, 'n' how many times can a man turn his head, Pretending he just doesn't see? / The answer, my friend, is blowin' in the wind…” Bob Dylan
“¿Cuantos años existirá una montaña, antes que se deshaga en el mar? / ¿Cuantos años debe la gente existir, antes de que se les permita ser libres? / ¿Cuántos veces puede un hombre volver la cabeza, pretendiendo que no ve? / La respuesta, mi amigo, está soplando en el viento…” Bob Dylan
La noche fue casi perfecta…Entre el sonido del motor de mi inolvidable Renault R8/S, la música de Bob Dylan, el cielo estrellado, el friíto, la vista de las pirámides de Teotihuacan, era un placer conducir rumbo a una Ciudad de México entonces segura, sin tráfico y bellamente iluminada por la temporada navideña…
Solo que nada es para siempre, siempre hay un pelo en la sopa: La música de Dylan provenía de una estación de radio que justo, como todas las del país, concluiría su programación normal unos minutos más tarde para enlazarse como cada domingo a las 10:30 de la noche en una cadena nacional de estaciones de radio. Y no tenía opción, en ese entonces, 1973, aún no se inventaban el Ipod, ni el CD, ni los toca cintas –de las chiquitas-… El “cuino” como le decía de cariño a mi R8/S, solo tenía un “moderno” reproductor de aquellos enormes cartuchos de ¡ocho pistas! cuyo deporte favorito en esos días no era tocar, ¡si no enredar las cintas!…
Así que, o escuchaba la “Hora Nacional,” ó nada. La decisión no estaba en duda. El programa de la Hora Nacional, concebida como un medio del gobierno federal para estrechar la comunicación con la sociedad y fortalecer la integración nacional a través del idioma, la cultura, las tradiciones y la creación artística, logró, no sé si los objetivos propuestos, pero sí el milagro de sumar las voluntades de millones de mexicanos en un acto simbólico si, pero de un gran significado: “La Hora Nacional, la hora en que todos los mexicanos apagamos el radio” era la frase favorita al momento de silenciar el radiorreceptor en cuanto concluíamos de escuchar respetuosamente el Himno Nacional que antecedía al programa. Podría haber estado muy bueno el programa ese pero, ¿En cadena nacional? ¿Obligado? ¡Nada!
En el 2007 se aprobó una reforma electoral que me llevó a reflexionar sobre el significado de la frase “Sufragio Efectivo, No Reelección” y a concluir que la reforma en ciernes, debería hacer de lado la basura legislativa acumulada por tantos años de privilegiar intereses de los gobernantes en turno. Se debia partir de cero y construir un nuevo sistema que permitiese a México consolidar su incipiente democracia. Imaginé entonces el contenido mínimo de una verdadera reforma electoral, que incluyera un IFE fortalecido y no demeritado como ahora, reducido al papel de una moderna inquisición electoral; con figuras como el referéndum, el plebiscito, la reelección y las candidaturas ciudadanas.
Poco me duró el gusto de soñar el sueño guajiro de un México democrático. De hecho tuve un muy amargo despertar. No se aprobó una reforma, se aprobó un retroceso electoral que impuso la partidocracia que mostró con todo cinismo, su verdadero carácter a Juan Pueblo; los tres grandes admirablemente superaron con toda diligencia y prontitud sus “diferencias” para ponerse de acuerdo en un crimen de lesa humanidad, como en su oportunidad comenté: Abortar la gestación de la democracia.
Juan Pueblo puede votar como siempre, pero no aspirar a un cargo de elección popular y ser realmente ciudadano, pues esto solo podrán concederlo los partidos políticos; puede escuchar las promesas de campaña pero solo eso, pues no puede reelegir a los candidatos que efectivamente las cumplan; tiene ahora campañas blancas donde esta prohibido decir cosas “impropias” pero solo eso, pues no puede escuchar las verdades que también se dicen; tiene libertad de expresión pero solo en el café, pues no puede difundirla al no tener acceso a los medios de comunicación; puede mantenerse informado, pero solo de lo que digan los partidos políticos; puede ver como se despilfarra el dinero pero no exigir rendición de cuentas; tiene campañas más cortas pero solo eso, porque el dinero que gastan por día es mayor con precampañas que ahora si están “reguladas”; tiene un IFE como árbitro pero solo eso, porque los jugadores le podrán sacar tarjeta roja y expulsarlo del campo.
Y las consecuencias están ahí, los medios de comunicación haciendo lo que se les viene en gana con un Juan Pueblo, ciudadano de segunda, que ahora tendrá que ir por la botana antes que indigestarse con los benditos spots que son como siempre han sido. Más de lo mismo.
Por qué a fuerza, ¡ni los zapatos entran!
“¿Cuantos años existirá una montaña, antes que se deshaga en el mar? / ¿Cuantos años debe alguna gente existir, antes de que se les permita ser libres? / ¿Cuántos veces puede un hombre volver la cabeza, pretendiendo que no ve? / La respuesta, mi amigo, está soplando en el viento…” Bob Dylan
Con mis mejores deseos,
Enrique Chávez Marantoenrique.chm@gmail.com
“¿Cuantos años existirá una montaña, antes que se deshaga en el mar? / ¿Cuantos años debe la gente existir, antes de que se les permita ser libres? / ¿Cuántos veces puede un hombre volver la cabeza, pretendiendo que no ve? / La respuesta, mi amigo, está soplando en el viento…” Bob Dylan
La noche fue casi perfecta…Entre el sonido del motor de mi inolvidable Renault R8/S, la música de Bob Dylan, el cielo estrellado, el friíto, la vista de las pirámides de Teotihuacan, era un placer conducir rumbo a una Ciudad de México entonces segura, sin tráfico y bellamente iluminada por la temporada navideña…
Solo que nada es para siempre, siempre hay un pelo en la sopa: La música de Dylan provenía de una estación de radio que justo, como todas las del país, concluiría su programación normal unos minutos más tarde para enlazarse como cada domingo a las 10:30 de la noche en una cadena nacional de estaciones de radio. Y no tenía opción, en ese entonces, 1973, aún no se inventaban el Ipod, ni el CD, ni los toca cintas –de las chiquitas-… El “cuino” como le decía de cariño a mi R8/S, solo tenía un “moderno” reproductor de aquellos enormes cartuchos de ¡ocho pistas! cuyo deporte favorito en esos días no era tocar, ¡si no enredar las cintas!…
Así que, o escuchaba la “Hora Nacional,” ó nada. La decisión no estaba en duda. El programa de la Hora Nacional, concebida como un medio del gobierno federal para estrechar la comunicación con la sociedad y fortalecer la integración nacional a través del idioma, la cultura, las tradiciones y la creación artística, logró, no sé si los objetivos propuestos, pero sí el milagro de sumar las voluntades de millones de mexicanos en un acto simbólico si, pero de un gran significado: “La Hora Nacional, la hora en que todos los mexicanos apagamos el radio” era la frase favorita al momento de silenciar el radiorreceptor en cuanto concluíamos de escuchar respetuosamente el Himno Nacional que antecedía al programa. Podría haber estado muy bueno el programa ese pero, ¿En cadena nacional? ¿Obligado? ¡Nada!
En el 2007 se aprobó una reforma electoral que me llevó a reflexionar sobre el significado de la frase “Sufragio Efectivo, No Reelección” y a concluir que la reforma en ciernes, debería hacer de lado la basura legislativa acumulada por tantos años de privilegiar intereses de los gobernantes en turno. Se debia partir de cero y construir un nuevo sistema que permitiese a México consolidar su incipiente democracia. Imaginé entonces el contenido mínimo de una verdadera reforma electoral, que incluyera un IFE fortalecido y no demeritado como ahora, reducido al papel de una moderna inquisición electoral; con figuras como el referéndum, el plebiscito, la reelección y las candidaturas ciudadanas.
Poco me duró el gusto de soñar el sueño guajiro de un México democrático. De hecho tuve un muy amargo despertar. No se aprobó una reforma, se aprobó un retroceso electoral que impuso la partidocracia que mostró con todo cinismo, su verdadero carácter a Juan Pueblo; los tres grandes admirablemente superaron con toda diligencia y prontitud sus “diferencias” para ponerse de acuerdo en un crimen de lesa humanidad, como en su oportunidad comenté: Abortar la gestación de la democracia.
Juan Pueblo puede votar como siempre, pero no aspirar a un cargo de elección popular y ser realmente ciudadano, pues esto solo podrán concederlo los partidos políticos; puede escuchar las promesas de campaña pero solo eso, pues no puede reelegir a los candidatos que efectivamente las cumplan; tiene ahora campañas blancas donde esta prohibido decir cosas “impropias” pero solo eso, pues no puede escuchar las verdades que también se dicen; tiene libertad de expresión pero solo en el café, pues no puede difundirla al no tener acceso a los medios de comunicación; puede mantenerse informado, pero solo de lo que digan los partidos políticos; puede ver como se despilfarra el dinero pero no exigir rendición de cuentas; tiene campañas más cortas pero solo eso, porque el dinero que gastan por día es mayor con precampañas que ahora si están “reguladas”; tiene un IFE como árbitro pero solo eso, porque los jugadores le podrán sacar tarjeta roja y expulsarlo del campo.
Y las consecuencias están ahí, los medios de comunicación haciendo lo que se les viene en gana con un Juan Pueblo, ciudadano de segunda, que ahora tendrá que ir por la botana antes que indigestarse con los benditos spots que son como siempre han sido. Más de lo mismo.
Por qué a fuerza, ¡ni los zapatos entran!
“¿Cuantos años existirá una montaña, antes que se deshaga en el mar? / ¿Cuantos años debe alguna gente existir, antes de que se les permita ser libres? / ¿Cuántos veces puede un hombre volver la cabeza, pretendiendo que no ve? / La respuesta, mi amigo, está soplando en el viento…” Bob Dylan
Con mis mejores deseos,
Enrique Chávez Marantoenrique.chm@gmail.com
domingo, 1 de febrero de 2009
La naturaleza del alacrán...
Estuve brevemente, pero eso sí, verdaderamente enojado, furibundo, iracundo, encolerizado, encrespado, indignado y cualquier otro sinónimo aplicable por las multimillonarias bonificaciones que recibieron en 2008 los ejecutivos de Wall Street no obstante la crisis financiera y la recesión económica mundial.
Algunos maldicientes afirman que de la primera parte del rescate, que les concedió el gobierno de Bush, se otorgaron en bonos la nada despreciable cantidad de $18 mil 400 millones de dólares, la sexta más grande de la historia de ese centro financiero...aunque, pobrecitos ellos, realmente hicieron su mejor esfuerzo; solidarios con los contribuyentes, que son quienes están pagando el costo de la crisis, se apretaron el cinturón y esa cantidad ¡solo ascendió al 50% de lo que recibieron en el año 2007! Y bueno, también habría que abonar en su favor que cancelaron algunas compritas que podrían se consideradas como un exceso: Ya no viajarán más en jet privado… si no humildemente en primera clase...
El hecho fue considerado por el Presidente Barack Obama como “…escandaloso…” “…el colmo de la irresponsabilidad. Es vergonzoso…” y declaró indignado “El pueblo estadounidense entiende que estamos en un gran agujero del que tenemos que salir, pero no le gusta la idea de que haya gente que está cavando un agujero más grande...”
¡Uopss! Exceso de rudeza, les debió doler… tanto que ese mismo día las bolsas cayeron fuertemente, no obstante que ya le habían aprobado al Presidente Obama la segunda parte del rescate, que acaso sirva digo yo ¡para los bonos del año que entra!
Solo que como antes dije mi enojo fue breve porque vino a mi mente la historia del alacrán y la rana, ¿La recuerdan? Sí aquella fábula donde la rana, convencida por la labia y las promesas del alacrán acepta, a pesar de sus temores, transportarlo a un lugar seguro. A la postre el alacrán incumple sus promesas, pica a la rana que cuando agoniza le pregunta que porqué lo ha hecho, el alacrán le contesta “perdóname...no pude evitarlo, está en mi naturaleza, soy un alacrán”
¿Cómo la rana podría enojarse con el alacrán? En todo caso la rana tendría que enojarse consigo misma por no entender que el impulso asesino del alacrán es incontrolable no obstante todas sus buenas intenciones. ¿Cómo podría el mundo enojarse con los financieros de Wall Street? En todo caso el mundo tendría que enojarse consigo mismo por no entender que la avaricia les es incontrolable. En consecuencia ¿Cómo podría permanecer yo enojado más allá de unos instantes…? Esperaría lo mismo del Presidente Obama y su equipo de trabajo, que la indignación les dure poco y con la cabeza fría actúen.
Los síntomas de la naturaleza avariciosa, corrupta, sin escrúpulos y carente de ética de muchos de los controladores de los sistemas económicos, financieros y empresariales han estado ahí siempre: Jerome Kerviel, Enron, Worldcom, las tiendas de raya globales como, entre muchas, Wall Mart que así fue reconocida por la Suprema Corte de Justicia Mexicana, rescates fallidos de grandes empresas y muchos otros escándalos financieros, son los síntomas de una enfermedad que nadie quiso ó pudo diagnosticar y mucho menos prevenir.
Ahora en Davos 2009 sobran plañideros y plañideras. A ellos habría que decirles que no tienen excusa, porque las señales de la crisis -que el primer ministro ruso, Vladimir Putin etiqueta como la “tormenta perfecta” y que el financiero George Soros dice no pudo prever- siempre estuvieron ahí. Solo que no hay peor ciego que él que no quiere ver; ó peor ignorante que él que no quiere aprender salvo, claro está ¡Cuando convenga a sus intereses!
México está haciendo frente a la “tormenta perfecta” en mejores condiciones que otros países. La contratación de un “seguro” para garantizar los ingresos petroleros fue una medida más que acertada cuando el año pasado todas las previsiones apuntaban a que los precios seguirían subiendo; benditos sean quienes instrumentaron la idea. Eso nos da un año de plazo para que las medidas que ya está tomando el gobierno aterricen antes del 2010 que será complicadísimo. 2010 en el que necesariamente se tendrá que hacer uso inteligente de las reservas internacionales de dólares del país.
Pero no todo está en manos del gobierno, también nosotros, los empresarios, los consumidores; todos, absolutamente todos los ciudadanos tendremos que hacer nuestra parte y la palabra clave es ahorrar. Para esto le pido que aplique el refrán aquel que dice “de que lloren en mi casa, que lloren en la de enfrente” que en la crisis sería “de que lloremos en México, que lloren en otros países". ¿Cómo?
a) Compre estrictamente lo necesario y deje la satisfacción de sus deseos –los gastos inútiles- para mejores épocas; b) Compre productos hechos en México, peso que Usted gaste en productos importados, saldrá de México convertido en dólares para ayudar al país de origen a resolver sus problemas, a crear o mantener empleos a costa de los nuestros. c) Pague sus deudas cuanto antes y ahorre intereses; los bancos en México, salvo BANORTE y algún otro, están en manos extranjeras ávidas de dólares para resolver la crisis financiera en que se encuentran sus matrices. Peso que gaste en intereses, que ya los subieron, se irá fuera de México para ayudar a resolver los problemas financieros de la banca extranjera. d) Ahorre gasolina reduciendo el uso de su vehículo. De cada 10 litros que consume, 4 litros es gasolina importada que se paga en dólares que necesitamos aquí. En suma, ¡Ahorre! ¡Ahorre!
Finalmente, como dice Sarah Délano, solo espero “en un mundo que parece tambalearse… a esos lazarillos…que se aparecen en la noche oscura del alma para dar cobijo y luz.” Y también a la par ¡mucho trabajo!
Con mis mejores deseos,
Enrique Chávez Maranto
enrique.chm@gmail.com
Algunos maldicientes afirman que de la primera parte del rescate, que les concedió el gobierno de Bush, se otorgaron en bonos la nada despreciable cantidad de $18 mil 400 millones de dólares, la sexta más grande de la historia de ese centro financiero...aunque, pobrecitos ellos, realmente hicieron su mejor esfuerzo; solidarios con los contribuyentes, que son quienes están pagando el costo de la crisis, se apretaron el cinturón y esa cantidad ¡solo ascendió al 50% de lo que recibieron en el año 2007! Y bueno, también habría que abonar en su favor que cancelaron algunas compritas que podrían se consideradas como un exceso: Ya no viajarán más en jet privado… si no humildemente en primera clase...
El hecho fue considerado por el Presidente Barack Obama como “…escandaloso…” “…el colmo de la irresponsabilidad. Es vergonzoso…” y declaró indignado “El pueblo estadounidense entiende que estamos en un gran agujero del que tenemos que salir, pero no le gusta la idea de que haya gente que está cavando un agujero más grande...”
¡Uopss! Exceso de rudeza, les debió doler… tanto que ese mismo día las bolsas cayeron fuertemente, no obstante que ya le habían aprobado al Presidente Obama la segunda parte del rescate, que acaso sirva digo yo ¡para los bonos del año que entra!
Solo que como antes dije mi enojo fue breve porque vino a mi mente la historia del alacrán y la rana, ¿La recuerdan? Sí aquella fábula donde la rana, convencida por la labia y las promesas del alacrán acepta, a pesar de sus temores, transportarlo a un lugar seguro. A la postre el alacrán incumple sus promesas, pica a la rana que cuando agoniza le pregunta que porqué lo ha hecho, el alacrán le contesta “perdóname...no pude evitarlo, está en mi naturaleza, soy un alacrán”
¿Cómo la rana podría enojarse con el alacrán? En todo caso la rana tendría que enojarse consigo misma por no entender que el impulso asesino del alacrán es incontrolable no obstante todas sus buenas intenciones. ¿Cómo podría el mundo enojarse con los financieros de Wall Street? En todo caso el mundo tendría que enojarse consigo mismo por no entender que la avaricia les es incontrolable. En consecuencia ¿Cómo podría permanecer yo enojado más allá de unos instantes…? Esperaría lo mismo del Presidente Obama y su equipo de trabajo, que la indignación les dure poco y con la cabeza fría actúen.
Los síntomas de la naturaleza avariciosa, corrupta, sin escrúpulos y carente de ética de muchos de los controladores de los sistemas económicos, financieros y empresariales han estado ahí siempre: Jerome Kerviel, Enron, Worldcom, las tiendas de raya globales como, entre muchas, Wall Mart que así fue reconocida por la Suprema Corte de Justicia Mexicana, rescates fallidos de grandes empresas y muchos otros escándalos financieros, son los síntomas de una enfermedad que nadie quiso ó pudo diagnosticar y mucho menos prevenir.
Ahora en Davos 2009 sobran plañideros y plañideras. A ellos habría que decirles que no tienen excusa, porque las señales de la crisis -que el primer ministro ruso, Vladimir Putin etiqueta como la “tormenta perfecta” y que el financiero George Soros dice no pudo prever- siempre estuvieron ahí. Solo que no hay peor ciego que él que no quiere ver; ó peor ignorante que él que no quiere aprender salvo, claro está ¡Cuando convenga a sus intereses!
México está haciendo frente a la “tormenta perfecta” en mejores condiciones que otros países. La contratación de un “seguro” para garantizar los ingresos petroleros fue una medida más que acertada cuando el año pasado todas las previsiones apuntaban a que los precios seguirían subiendo; benditos sean quienes instrumentaron la idea. Eso nos da un año de plazo para que las medidas que ya está tomando el gobierno aterricen antes del 2010 que será complicadísimo. 2010 en el que necesariamente se tendrá que hacer uso inteligente de las reservas internacionales de dólares del país.
Pero no todo está en manos del gobierno, también nosotros, los empresarios, los consumidores; todos, absolutamente todos los ciudadanos tendremos que hacer nuestra parte y la palabra clave es ahorrar. Para esto le pido que aplique el refrán aquel que dice “de que lloren en mi casa, que lloren en la de enfrente” que en la crisis sería “de que lloremos en México, que lloren en otros países". ¿Cómo?
a) Compre estrictamente lo necesario y deje la satisfacción de sus deseos –los gastos inútiles- para mejores épocas; b) Compre productos hechos en México, peso que Usted gaste en productos importados, saldrá de México convertido en dólares para ayudar al país de origen a resolver sus problemas, a crear o mantener empleos a costa de los nuestros. c) Pague sus deudas cuanto antes y ahorre intereses; los bancos en México, salvo BANORTE y algún otro, están en manos extranjeras ávidas de dólares para resolver la crisis financiera en que se encuentran sus matrices. Peso que gaste en intereses, que ya los subieron, se irá fuera de México para ayudar a resolver los problemas financieros de la banca extranjera. d) Ahorre gasolina reduciendo el uso de su vehículo. De cada 10 litros que consume, 4 litros es gasolina importada que se paga en dólares que necesitamos aquí. En suma, ¡Ahorre! ¡Ahorre!
Finalmente, como dice Sarah Délano, solo espero “en un mundo que parece tambalearse… a esos lazarillos…que se aparecen en la noche oscura del alma para dar cobijo y luz.” Y también a la par ¡mucho trabajo!
Con mis mejores deseos,
Enrique Chávez Maranto
enrique.chm@gmail.com
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